martes, 29 de abril de 2008

La Reforma de Calderón Anticonstitucional: Pável Meléndez

El pasado 9 de abril el Ejecutivo Federal envió al Senado de la República su iniciativa de Reforma Energética con la que se intenta la PRIVATIZACIÓN de PEMEX.

Estas reformas pretenden modificar las leyes secundarias como la Ley Orgánica de PEMEX y de la Administración Pública Federal, violando totalmente los principios fundamentales del Artículo 27 de nuestra Constitución Política sobre la exclusividad de Estado en la rectoría de la industria del petróleo.

Contempla la apertura al sector privado, para que empresarios nacionales o extranjeros puedan ejecutar la extracción, la refinación así como del transporte, almacenamiento y distribución de refinados y petroquímicos básicos, reduciendo al Estado mexicano como proveedor de materia prima, entregando con ello las enormes ganancias que genera su explotación.

El Gobierno Federal MIENTE al decir que sin esta reforma privatizadora, no habrá recursos para modernizar PEMEX; pues todos sabemos que existe un sobrante presupuestal de mas de 40 mil millones de dólares de Petróleos Mexicanos y se estima que para la construcción de una nueva refinería (para no seguir comprando gasolina del exterior) se invertirían cerca de 7 mil millones de dólares.

Esto sin contar los EXCEDENTES PETROLEROS (ganancia no presupuestada) que ha obtenido PEMEX por la venta del crudo por mas de 130 millones de dólares; toda vez que en la Cámara de Diputados aprobamos un costo de 49 dólares por barril, para solventar los gastos del gobierno: carreteras, programas sociales, escuelas, sueldos, gasto corriente, etc., y en el mercado mundial, ha llegado a colocar al barril del crudo mexicano casi a 100 dólares por barril.

Estas ganancias de miles de millones de dólares no presupuestadas, no tienen un destino claro y el gobierno los ha gastado a discreción; por ello es FALSO lo que el Sr. Calderón dice al pueblo “por que sin esta reforma no habría dinero para escuelas y programas sociales”.

Se violenta a todas luces la Constitución y se eleva a rango de ley la corrupción por que:


· Se permitiría que el Gobierno designe a funcionarios y “ciudadanos” para la alta toma de decisiones sin fiscalización alguna y así garantizar utilizar para el bien de ciertos inversionistas privados y el uso discrecional de los excedentes sin autorización del Poder Legislativo.
· Anulan las licitaciones públicas a empresas privadas (concesión de contratos de obras y servicios), dice la iniciativa “por invitación restringida” o en forma directa, favoreciendo así a familias poderosas como las de Juan Camilo Mouriño (Secretario de Gobernación) y la alta burocracia de PEMEX y la dirección corrupta del Sindicato Petrolero.

· Se permitirá llevar a particulares créditos emitidos por PEMEX con supuestos “bonos ciudadanos” a discreción de Hacienda sin limites y formas de adquisición, que los grandes capitales se beneficiarían y no el pueblo.

· Se le faculta a la Secretaria de Energía otorgar permisos PRIVADOS para ejecución de obras y trabajos de explotación y exploración del crudo, es decir en lugar que PEMEX contrate expertos y trabajadores mexicanos, dejarán que lo realicen empresas privadas.

Dejar que se consume el saqueo a la nación por parte del PAN y PRI, seria traicionar nuestro mandato constitucional de velar por la Republica y la Constitución. No podemos permitir la entrega del Petróleo como lo hicieron con TELMEX, Ferrocarriles Nacionales, bancos, carreteras y hasta el patrimonio de trabajadores como en la Ley del ISSSTE.

No traicionaremos el legado histórico y patriota del GRAL. LAZARO CARDENAS DEL RIO, que en 1938, expropió de manos extranjeras nuestra industria nacional petrolera, dejándolo como patrimonio nacional para las futuras generaciones. Por eso tomamos la tribuna y seguiremos luchando en contra de las mentiras desvergonzadas del usurpador Felipe Calderón y el PAN.

Es por ello que hago un llamado consiente a defender lo que es nuestro y no dejarnos influenciar por la TV o los medios de comunicación irresponsables, que actúan al amparo de esos intereses económicos que quieren quedarse con nuestro Petróleo.

Los invito a participar en las brigadas pacificas en defensa del Petróleo y exigir al unísono la defensa de PEMEX y la consulta abierta (referéndum) a todas y todos los mexicanos sobre este tema tan importante.

¡ LA PATRIA NO SE VENDE, SE DEFIENDE ¡

miércoles, 16 de abril de 2008

RESOLUCION IUSY: Solidaridad al Movimiento en Defensa del Petroleo Mexicano

Ammán, Jordania, 13 de abril de 2008.

La Unión Internacional de Juventudes Socialistas (IUSY) se solidariza con la lucha emprendida por el camarada Andrés Manuel López Obrador, proclamado por la Juventud del Partido de la Revolución Democrática como Presidente Legitimo de México, que en la asamblea de la Comisión Nacional el Defensa del Petróleo, ha decidido emprender acciones pacificas en defensa de su soberanía energética.

Compartiendo que la privatización y reforma a la ley reglamentaria del artículo 27 de la constitución mexicana, permitirían la celebración de los llamados contratos riesgo, contratos de servicios múltiples y la asociación con empresas extranjeras, significaría aceptar sumisamente la violación impune a la ley suprema mexicana.

Es por ello que nos sumamos a la preocupación por la privatización del petróleo en México, ya que dejaría de ser un país libre y soberano, se rompería su orden constitucional; se elevaría a rango supremo la corrupción; se quedarían sin la posibilidad de transitar por un camino propio, con un modelo de desarrollo que concilie el crecimiento con el bienestar; por lo que de perder soberanía, será muy difícil, por razones geopolíticas, recuperar el dominio de la Nación sobre sus recursos energéticos. Y se daría lugar a constantes fricciones, desacuerdos y conflictos.


Por todo ello la IUSY, saluda y se solidariza con el esfuerzo de Comisión Nacional el Defensa del Petróleo y los ciudadanos e intelectuales libres que les convocan, para hacer una defensa patriota y pacifica en la organización e integración de veinte grupos de 10 mil brigadistas mujeres y demás mexicanos legítimamente constituidos en defensa de su soberanía energética.
Jacinda Arden
Presidenta Mundial de IUSY.
Vicepresidentes Mundiales de IUSY.
(versión en inglés)

The International Union of Socialist Youth (IUSY) solidarity with the struggle launched by Comrade Andres Manuel Lopez Obrador, proclaimed by the Youth of the Party of the Democratic Revolution as Legitimate President of Mexico, in the assembly of the National Commission on Defense Oil has decided to undertake peaceful actions in defense of its sovereignty energy.

Sharing that privatization and regulatory reform to the law of article 27 of the Mexican Constitution, would allow the holding of so-called risk contracts, service contracts and multiple partnerships with foreign firms, would submissively accept the rape with impunity to the Mexican supreme law.

That is why we join the concern over the privatization of oil in Mexico, since it would no longer be a free and sovereign country, it would break the constitutional order; would rise to the highest rank corruption; go without the possibility of transiting a path of its own, with a development model that reconciles the growth in welfare, therefore losing sovereignty, it will be very difficult, for geopolitical reasons, to recover the domain of the Nation on its energy resources. And it would result in constant friction, disagreements and conflicts.

Therefore IUSY, salutes and give solidarity with the effort of the National Defense Commission of Petroleum and free citizens and intellectuals who convened them to make a defense patriot and peaceful in the organization and integration of twenty groups brigade of 10 thousand women and other mexicans legitimately formed to defend its sovereignty energy.

lunes, 31 de marzo de 2008

La expropiación de la industria petrolera


Gonzalo Martínez Corbalá.


Cerca ya de conmemorar los dos siglos de distancia histórica de la Independencia y a uno de la Revolución Mexicana, conviene darle una ojeada a la historia de la expropiación petrolera, a lo que la hizo posible, a los obstáculos que se interpusieron para que ese hombre de gran visión que fue el general Lázaro Cárdenas la llevara a cabo, y luego también a las circunstancias que exigieron su realización, planteándose en 1938 la disyuntiva histórica de mantener la subordinación política a las grandes potencias industriales de entonces o de hacer realidad de una vez por todas los objetivos que se planteó la Independencia de 1810, así como cristalizar los compromisos sociales de la gesta revolucionaria de 1910 a 1917, fecha en que se concretan en la Constitución de Querétaro los anhelos que el pueblo en armas exigía después de que había corrido la sangre de millón y medio de compatriotas sobre suelo mexicano.
México no hacía otra cosa en 1938 que seguir los cauces normales por los que otros pueblos del mundo habrían de seguir, y por los que finalmente todos los países sometidos a un régimen colonial seguirían con el tiempo.
Se presentaban con mucha claridad dos fenómenos políticos, sociales y económicos que han convergido en diversas partes del mundo, forjando cauces libertarios desde entonces y hasta ahora ininterrumpidamente, tratándose de conciliar el derecho a la libre autodeterminación con la interdependencia entre las naciones. Este fenómeno histórico tan complejo ha marcado de muchas maneras y en diferentes medidas, los cauces por los que se han canalizado las luchas libertarias en todo el planeta, y México, como es natural, no ha podido sustraerse a esta tendencia del proceso evolutivo de todo el mundo.
A fines del siglo XIX y principios del XX empezó a considerarse la importancia del petróleo en su uso como fuente de energía en la industria en general, y muy especialmente en los ferrocarriles y en los barcos, y aun cuando hubo algunos intentos previos llevados a cabo por mexicanos para establecer la explotación de los yacimientos descubiertos en el sur de Veracruz, en Tabasco y en el istmo de Tehuantepec, no tuvieron éxito y fueron los extranjeros Edward Doheny y Weetman Pearson quienes lograron establecer las primeras explotaciones a gran escala al amparo del Código Minero de 1884, y las leyes de 1892 y 1901.
El Código Minero de 1884 vino a terminar con el principio del dominio del subsuelo expresado terminantemente en las ordenanzas de Aranjuez, publicadas por Carlos III el 22 de mayo de 1783, que fueron la primera legislación minera dictada para México, habiendo estado vigente precisamente hasta 1884, pues los gobiernos del México independiente adoptaron también esta legislación que, dicho sea de paso, en 1938 habría de ser la fundamentación de casi todos los alegatos jurídicos que se llevaron a cabo contra la expropiación petrolera y sobre la propiedad del subsuelo.
Toca en suerte al régimen de Porfirio Díaz sentar las bases de los orígenes de la industria petrolera, y lo hizo renunciando al principio del ejercicio de soberanía, dando en propiedad el subsuelo a los superficiarios, concediendo exenciones de impuestos para la importación de los equipos necesarios, así como para la exportación de petróleo y con toda clase de complacencias para con las compañías extranjeras.
El Estado no percibía entonces ningún beneficio con las explotaciones que se iniciaron a principios del siglo XX, concediendo a favor de las compañías extranjeras una especie de extraterritorialidad. Socialmente, el país tampoco recibía beneficio alguno, ya que los convenios de trabajo impuestos a los obreros propiamente eran de servidumbre.
Así pues, Díaz sentó bases firmes sobre las que posteriormente habría de nacer un gran imperio económico extranjero que debía de ser quizás el mayor problema que tuvo el país para realizar su emancipación política y económica, constituyéndose como un Estado dentro del Estado, con un poderío económico y político al que ni siquiera la lucha armada revolucionaria había afectado, pues durante todo este periodo habían sido sostenidas por las fuerzas militares bajo el mando del general Peláez, que las protegió en sus bienes y personas.
Tenían también a su servicio las tristemente célebres guardias blancas, de las que se valían para manejar a los empleados mexicanos a punta de bayoneta, y para conservar la autoridad de hecho sobre las extensas zonas que dominaban, y llegaban incluso a controlar los caminos de las zonas petroleras, por los que solamente podían transitar personas gratas a ellas.
Pronto se planteó el problema serio de orden internacional, motivado por las compañías petroleras. El presidente Madero creó el primer impuesto llamado “del timbre” para gravar la producción del petróleo en tres centavos por barril.
En 1911, el embajador estadunidense Henry Lane Wilson se quejó ante el gobierno –en nombre de las compañías– de que el impuesto resultaba demasiado alto. Así quedaba establecida la costumbre que había de acarrear muchos y muy grandes problemas al país: la intervención diplomática para proteger los intereses de extranjeros, y que desde ese momento el gobierno mexicano no podría ejercer libremente actos elementales de soberanía nacional sin encontrarse con las limitaciones que los gobiernos extranjeros le impondrían, las cuales en muchos casos debían ser definitivas y terminantes, como veremos más adelante a consecuencia del fuerte grado de dependencia que subyacía en nuestras relaciones con otros países.
En junio de 1912 se volvió a expedir otro decreto aumentando los impuestos, y en septiembre del mismo año el embajador Wilson envió la siguiente nota al secretario de Relaciones Exteriores de México:
“El gobierno de Estados Unidos desea hacer saber al presente gobierno de México que con la consiguiente sorpresa y natural recelo ha sido informado de ciertas partes… al parecer influidas por la avaricia y por la mal querencia a las empresas estadunidenses a consecuencia de su nacionalidad, están… persiguiendo y robando a dichas empresas en cada oportunidad favorable que se les presenta. La Associated Press ha sido molestada repetidas veces por las innecesarias y enojosas restricciones de las cuales no puede hacerse completamente responsable al gobierno… Las empresas petroleras norteamericanas de la región de Tampico presentan pruebas indudables de que están siendo gravadas con impuestos casi insoportables… El gobierno de Estados Unidos se ve obligado a insistir en que cese inmediatamente esta persecución que prácticamente equivale a la confiscación, y espera recibir del gobierno mexicano la seguridad inmediata de que pronto se hará esto”.

martes, 11 de marzo de 2008

Puede FAP formar comisión para investigar actuación de Mouriño: AMLO


México, 10 Mar (Notimex).- Andrés Manuel López Obrador aseguró que los partidos que conforman el Frente Amplio Progresista (FAP) cuentan con 125 miembros que se requieren para integrar una comisión que investigue la actuación de Juan Camilo Mouriño. En conferencia de prensa, donde presentó dos nuevos contratos que presuntamente se relacionan con Mouriño Terrazo, señaló que el gobierno federal pretende presentar las reformas legislativas para permitir inversión privada en Petróleos Mexicanos (Pemex) después de Semana Santa. "Tengo información de que esta iniciativa a leyes secundarias estaría presentándose en el Congreso el martes 25 de marzo, por eso debemos estar muy atentos y recordar la convocatoria para el 18 de marzo en el Zócalo" de la capital del país, dijo.

Expresó que este martes los partidos de la Revolución Democrática (PRD), Convergencia y del Trabajo (PT) -que conforman el FAP- iniciarán los trabajos para integrar dicha comisión. Aseguró que los contratos que presuntamente firmó Juan Camilo Mouriño se realizaron entre 2000 y 2004. En rueda de prensa por separado el coordinador de Convergencia en la Cámara de Diputados, Alejandro Chanona Burguete, presentó dos contratos más que se relacionan con Juan Camilo Mouriño, secretario de Gobernación.

El primer documento se refiere a un convenio entre la empresa Transportes Especializados Ivancar, firmado el 28 de agosto de 2001 por Mouriño como apoderado legal, y Pemex. El segundo documento fue firmado por Luis Fernando Coyoc, representante en 2005 de Ivancar, con Pemex-Refinación para el transporte de hidrocarburos y la Cámara Nacional de Transporte de Carga (Canacar).

lunes, 25 de febrero de 2008

Mouriño, principal promotor de la privatización de Pemex: AMLO

La Jornada 25 de Febrero.
Andrés Manuel López Obrador señaló al secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, como el principal promotor de la entrega del petróleo a particulares y lo acusó de ser un “traficante de influencias”. Sostuvo que, gracias a su gestión en la función pública, “el funcionario obtuvo de Petróleos Mexicanos (Pemex) contratos millonarios mediante el procedimiento de adjudicación directa para beneficio de su empresa familiar”.

En el primer mitin que encabezó frente a la torre de la paraestatal en la ciudad de México, para convocar a la suma de esfuerzos que en torno al plan de resistencia civil pacífica llevará a cabo el movimiento que encabeza, advirtió que “el despojo del petróleo dejaría latente el riesgo de una confrontación violenta, lo cual nos puede llevar a más sufrimiento, inestabilidad política y social, al predominio del uso de la fuerza, y no necesariamente a la emancipación del pueblo”.
Ante cientos de personas que se congregaron en el lugar –abarcando los dos sentidos de Marina Nacional– para expresarle su apoyo contra la privatización del sector, López Obrador entregó al coordinador de los diputados perredistas, Javier González Garza, “toda la documentación que poseo: minutas, contratos y datos técnicos para demostrar” los señalamientos en contra de Mouriño.
Lo anterior, con el propósito de que los legisladores del Frente Amplio Progresista (FAP), integrado por los partidos de la Revolución Democrática (PRD), del Trabajo (PT) y Convergencia soliciten, tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, la realización de las auditorías correspondientes a la paraestatal. Y que sirva además, dijo, para aclarar la relación que existe entre Felipe Calderón, el secretario de Gobernación y Alfredo Elías Ayub, director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), con empresas extranjeras para entregarles el sector energético.
“No le demos vueltas al asunto. Detrás de la pretensión de privatizar a Pemex está la codicia de las minorías rapaces y de funcionarios corruptos. Estos derechistas inmorales ignoran lo que decía don Jesús Reyes Heroles: ‘los únicos negocios que a los políticos o funcionarios nos deben interesar son los negocios públicos”’, parafraseó.
“Por eso digo que nunca como ahora es tan aplicable la frase de Bertolt Brecht, según la cual el peor de todos los ladrones es el político corrupto, lacayo de las empresas nacionales y multinacionales”.
El ex candidato presidencial enarboló como símbolo de lucha la bandera nacional, para reafirmar su decisión de no permitir que se concreten los propósitos que, aseguró, encabezan las cúpulas en el poder. Sostuvo que ésa es la respuesta del porqué los gobiernos neoliberales dejaron de invertir en exploración, refinación, petroquímica, investigación y desarrollo tecnológico. Aunque parezca increíble, remató, “desde hace 25 años todos los gobernantes han mantenido como dogma la idea fija de privatizar a Pemex y no les ha importado arruinar a la industria petrolera para tener el pretexto de convertirla en un negocio de particulares”.
Desde 1983, recordó, han pasado a manos de particulares más de mil empresas públicas: Teléfonos de México, Ferrocarriles Nacionales, minas, aeropuertos, Mexicana, Aeroméxico, los bancos; ya privatizaron 35 por ciento de la industria eléctrica nacional y “ahora quieren montarse en el negocio del petróleo”.
Se manifestó en contra de la utilización de “eufemismos” para “ocultar” el propósito de concretar ese proyecto, al argumentar que falta dinero o tecnología para modernizar a la industria, cuando –planteó– extraer un barril de petróleo cuesta 4 dólares y se vende en 80. Además, recordó, la paraestatal pagó impuestos por 60 millones de dólares, tan sólo el año pasado, equivalentes a 38 por ciento del presupuesto federal, y tres veces más de lo pagado por todas las empresas privadas del país por impuesto sobre la renta.
Por eso, advirtió, “no aceptamos, que se oiga bien y que se oiga lejos, nada que tenga que ver con privatizar a Pemex o compartir la renta petrolera”. Es más, señaló, “esto huele” a lo que querían hacer con el Servicio de Administración Tributaria antes de las elecciones de 2006, para dejar la política de ingresos en manos de “los potentados y evitar que desde el Poder Ejecutivo se promoviera una verdadera reforma fiscal”.
O a lo mejor “quieren una especie de IFE, que supuestamente se maneja con independencia, cuando todos sabemos que sus integrantes no son más que empleados del PRIAN. Y, por si fuera poco, todo ello es violatorio de la Constitución”. Apuntó que “sólo es cosa” de reducir el gasto burocrático y terminar con los privilegios de los altos funcionarios para fortalecer a la empresa pública o cuando menos –dijo– entregarle los excedentes petroleros. Pero también, añadió, hace falta “combatir la corrupción”. Entonces se manifestó por las auditorías para aclarar la relación Calderón-Mouriño-Elías Ayub y para conocer realmente “quién es” el actual secretario de Gobernación.

“Es un traficante de influencias, como lo demuestra que, siendo presidente de la Comisión de Energía en la Cámara de Diputados y posteriormente subsecretario de Energía, con Calderón, obtuvo de Pemex contratos millonarios mediante el procedimiento de adjudicación directa para beneficio de su empresa familiar”, apuntó.
López Obrador pidió apoyar el plan de resistencia civil pacífica contra la privatización, y estar alertas ante cualquier intento al respecto. “Hagamos asambleas públicas, informemos a la gente y formemos las brigadas para la defensa del sector”, resaltó. Dijo que, de no ser necesario antes, la próxima reunión será el 18 de marzo a las 5 de la tarde, en el Zócalo capitalino.
Tras señalar que quienes integran su movimiento quieren la paz, aprovechó para reiterar su rechazo a la reforma judicial y llamó a los dirigentes del FAP a explorar todas las posibilidades legales para lograr la libertad de los presos de San Salvador Atenco, de Flavio Sosa y de todos aquellos encarcelados por motivos políticos o sociales.